lunes, 22 de abril de 2013

Esa terrible tos.

Hablábamos en la entrada anterior de que la primavera trae sus cosas buenas y sus cosas malas. Hoy toca hablar de otra de las cosas malas que trae esta primavera en cuestión. "La tos de la perrera". No es que sea una enfermedad típica de esta estación, es más bien invernal, pero una de las causas que pueden desencadenarla es el cambio brusco de temperaturas, y coincidiremos todos en que este año ha habido un cambio muy, muy brusco. 


No se trata de una enfermedad considerada grave, aunque hay que tratarla porque de no hacerlo puede causar problemas serios en la salud de nuestros perros. Hay vacunas para tratar de prevenirla, pero entre sus causas pueden estar tanto bacterias como virus, así que con esta vacuna pasa como con la de la gripe humana, que dependiendo de la cepa es efectiva o no. 



Se conoce como "tos de la perrera" porque suele aparecer en ambientes en los que hay muchos perros juntos, pero que nunca hayas llevado a tu perro a una residencia canina no significa que esté libre de cogerla, ya que es una enfermedad altamente contagiosa y un solo perro afectado puede contagiar a todo aquel que se encuentre en sus paseos. 



Los cachorros y perros jóvenes son más propensos a contagiarse, ya que los adultos han desarrollado cierto grado de inmunidad activa por los contactos repetidos con el agente infeccioso natural.



El síntoma es la tos seca, que a veces produce vómito, y en ocasiones también aparece la fiebre. Esta tos perdura varias semanas incluso siendo tratada, y de no serlo puede acabar en bronquitis y bronconeumonía crónicas. Es imprescindible visitar al veterinario cuando notemos esta tos que les afecta más a menudo tras el ejercicio físico (carreras, juegos, etc), aunque también durante el sueño y al despertar. 




Queremos hacer especial hincapié en la importancia de visitar al veterinario y no medicar a nuestros perros por nuestra cuenta. Esta práctica de la auto-medicación ya es peligrosa en las personas, pero puede serlo aún más con los perros, ya que sólo un profesional de la medicina animal puede saber qué medicamento debe suministrarse y en qué dosis exacta.




El tratamiento es largo ya que la tos tarda en desaparecer, pero es imprescindible. Y para aquellos que también se preocupan de la salud de su bolsillo, no se trata de un tratamiento caro. Unas pocas semanas y nuestros perros estarán listos para seguir disfrutando del buen tiempo.

lunes, 15 de abril de 2013

Bichos.

¡Por fin ha salido el sol! Se ha hecho mucho de rogar pero parece que al fin ha llegado la primavera. Los parques se han llegado de gente, niños, mayores, bicis, patines, perros... Y no sabemos si os habéis fijado, pero también se han llenado de mosquitos, hormigas, abejas y muchos otros bichitos. Es tiempo de desparasitar externamente a nuestros perros, ya que el buen tiempo trae muchas cosas buenas, y alguna que otra cosa no tan buena, como las pulgas y las garrapatas.  


Existen en el mercado diversas marcas y varios formatos que pueden ayudarnos a que el buen tiempo y sus bichos no se conviertan en una pesadilla. Pastillas, sprays, pipetas, collares... Hay para todos los gustos. Pero cuidado, podríamos decir que también hay para todos los bolsillos, aunque nosotros no aconsejamos arriesgar la salud de nuestros perros por ahorrarnos unos euros. La mayoría de los antiparasitarios baratos lo son en todos los sentidos de la palabra. No sólo no tienen la capacidad esperada de evitar los parásitos, sino que en ocasiones son nocivos para la piel de nuestros perros. Nos quedamos con el refrán popular "lo barato sale caro", y cuando se trata de la salud de nuestros perros, y en este caso también de los que convivimos con ellos, arriesgar no es lo más sensato.

Vuestro veterinario os puede aconsejar marcas y formatos. Tan importante es comprar los productos de desparasitación interna en el lugar apropiado, como lo es comprar los de desparasitación externa. ¿Arriesgarías tu salud o la de los tuyos comprando tus medicinas en un "todo a 1€"? No, ¿verdad? Seguro que a todos os suenan Frontline, Advantix, Stronghold, Virbac o Scalibor, son marcas de gran eficacia y cuyo precio merece la pena pagar. También hay remedios naturales, para los amantes de las plantas y de sus propiedades. Por ejemplo el aceite de neem es un insecticida natural que repele pulgas y garrapatas, las hojas de este árbol también funcionan contra los parásitos intestinales. Hay también en el mercado productos naturales, como collares impregnados con de aceites esenciales de plantas que mantienen a raya a los molestos parásitos externos y que evitan cualquier tipo de intoxicación cuando nuestros perros juegan por ejemplo a mordisquearse el cuello.

Como decíamos al principio, hay de todo y para todos los gustos. La desparasitación externa de nuestros perros es tan esencial para su salud como lo es la desparasitación interna. Y no hay que olvidar que también es muy importante para nuestra salud. Recordemos que éstos parásitos pueden ser altamente dañinos para nosotros (garrapatas), o una verdadera plaga muy difícil de erradicar una vez que se instala en nuestros hogares (pulgas).
Una vez tomadas las medidas necesarias contra los parásitos sólo nos queda un último consejo que daros: ¡disfrutad del buen tiempo! 




martes, 9 de abril de 2013

Más vale prevenir...

Alguna vez ya lo hemos dicho en nuestra página de facebook, antes de dar comida (premios, etc) a otros perros, pregunta primero a su dueño. Este tema nos parece tan importante que vamos a dedicarle una entrada completa. 

¿Por qué es tan importante? Porque sólo los dueños conocen las peculiaridades de sus perros, si son delicados de estómago, si están "a dieta", etc. Así que empezamos por la salud del propio animal. Por otro lado ¿qué conseguimos de los perros ajenos dándoles premios? Atención. Nos siguen, meten el hocico en nuestros bolsillos, se nos sientan delante, nos dan la pata, se nos suben encima, nos lamen las manos, nos ofrecen todos los comportamientos que conocen... "Los perros me adoran" dice mucha gente, pero no es verdad, los perros adoran comer. Peor aún y muy peligroso para todos, es cuando sólo conseguimos provocar una pelea por la comida. Esto por parte de los perros. ¿Qué conseguimos de los dueños? Intentos fallidos de controlar a los perros, tirones de correa, tirones de collar, enfados, Toby, Toby aquí, Toby para, ¡¡¡¡¡TOBY!!!!!, que te he dicho que vengas aquí, vale ya, ya no hay más premios, etc.

A veces se hace con toda la buena intención, pero la intención no basta para que una acción sea buena. Debemos pensar en las consecuencias a corto y a largo plazo. Las a corto plazo ya las conocemos, las a largo plazo son bastante más graves. 

Pongamos un ejemplo: "Fulanito" va al parque todas las tardes con los bolsillos llenos de chuches para los perros. Deja que le hagan monerías, se le suban, le chupen, etc. Una mañana soleada de domingo, "Fulanito" va a celebrar el evento x. Se ha vestido, planchado y perfumado para la ocasión. Por el camino se encuentra a uno de los perros a los que cada tarde da premios. ¿Qué pasa? Pues que el perro le hace monerías, se le sube, le chupa, o al menos va a intentarlo con todas sus fuerzas, para cabreo de sus dueños y por supuesto de "Fulanito", ¡que me manchas, quita hombre!, ¿no ves que hoy no tengo nada?. Pues no, el perro no ve que "Fulanito" no tiene nada, ni tiene por qué verlo. Es un animal de costumbres, como nosotros. Se ha acostumbrado a que cuando hace ciertas cosas "Fulanito" le da premios. No sabe que es domingo, ni qué es un evento, ni que no se puede saltar encima de la gente cuando es domingo y además van a un evento. Este ejemplo acaba mal para todos "Fulanito" puede que tenga que seguir su camino enfadadísimo y con algo de baba de perro en la manga, los dueños se deshacen en disculpas y enfadadísimos riñen al perro, que se lleva la peor parte, la bronca por parte de todos además de no entender nada de nada.

Puede ser aún peor. Vuestro perro es un cachorro tipo peluche, una bolita de pelo que todo el mundo adora, un alaska malamuten, un pastor alemán, un san bernardo, un husky siberiano, un golden retriever, un pastor del cáucaso... en realidad cualquier cachorro es adorable. Todo el mundo le da premios, niños y mayores, porque es monísimo, y no se pueden resistir a esos ojitos. El cachorro crece y de repente tenemos un perrazo de no sé cuántos kilos demandando la comida que antes todos le daban. Ya no hace falta ni que se suba encima, sólo con que se acerque provoca el miedo en muchas personas. Este ejemplo acaba fatal para todos, a gritos, las palabras bozal, peligroso, denuncia y policía, aparecen a menudo. 

¿Cómo podemos evitarlo? Siendo muy firmes, pero mucho. Bordes si hace falta. No dejéis que nadie dé comida a vuestros perros, sobre todo cuando hay niños de por medio. La energía que normalmente usáis en reñir al perro tras un caso así, usadla previamente en advertir muy seriamente a quienes quieran darle comida. Por vuestro bien, el del resto de personas y sobre todo por quienes tienen todas la de perder, los perros.




miércoles, 3 de abril de 2013

De niños y perros.

Las personas convivimos con muchas otras especies animales. A lo largo de la historia hemos aprendido a tratar a cada especie según sus características. Sabemos más o menos qué cosas toleran y qué otras no toleran. Y ellos, por su propio bien, también han aprendido a "lidiar" con nosotros. Aún así, sobre todo con los perros, hay cosas que no hacemos bien, y no haciéndolas provocamos situaciones incómodas e incluso peligrosas. La educación de nuestros perros es fundamental, en esto estaremos todos de acuerdo. Una buena relación con las personas y con otros perros sería lo ideal. Pero a veces no depende sólo de lo educado que esté vuestro perro. La educación de las personas en el trato con cualquier animal también es fundamental, especialmente con los perros porque son los animales con los que más nos relacionamos.

Qué mejor manera de ser una sociedad educada con respecto al trato con los perros que empezar con los niños. Este estupendo vídeo que encontramos en YouTube, describe perfectamente ésto que estamos diciendo, está en inglés así que debajo del vídeo ponemos la traducción. Se titula "I speak doggy" , que quiere decir literalmente "Hablo perrito". Sabemos que esta traducción en español no tiene sentido, la traducción más adecuada sería "Hablo el idioma de los perritos", pero queda muy largo y un poco raro, así que optamos por la traducción literal.



"Hablo el idioma de los perritos".
- Entiendo lo que les gusta a los perros, lo entiendo, lo entiendo.
- Entiendo lo que les gusta a los perros, yo hablo perrito.
- Abrazo a mis amigos, no abrazo a los perros, no abrazo a los perros, no abrazo a los perros.
- Abrazo a mis amigos, no abrazo a los perros porque yo hablo perrito.
- Les acaricio con una mano, del collar a la cola, del collar a la cola, del collar a la cola.
- Les acaricio con una mano del collar a la cola porque yo hablo perrito.
- Cuando él come yo me alejo, yo me alejo, yo me alejo.
- Cuando él duerme yo me alejo porque yo hablo perrito.
- Si él salta yo me quedo quieto así, me quedo quieto así, me quedo quieto así.
- Si él salta yo me quedo quieto porque yo hablo, porque yo hablo, porque yo hablo perrito.

Es una forma estupenda de enseñar a los niños a relacionarse con los perros y evitar momentos desagradables para ambos. Así los niños aprenden a acariciar a los perros, a acercarse a ellos, a evitar que les salten encima, a no entrometerse cuando comen o duermen, empezando por los perros de casa y trasladándolo a la calle.

Aquí os ponemos otro vídeo relacionado, esta vez habla de como acariciar y besar a los perros, y de cómo no hacerlo. Se llama "How to kiss a dog" (Cómo besar a un perro), y la traducción de nuevo va debajo del vídeo.



Traigo un mensaje muy importante. Se dice que los niños han estado abrazando y besando perros y eso no está bien. 
- Perdona señorita, ¿sabías que a los perros no les gusta que les besen?
- No lo entiendo ¿por qué no?
- Les da mucho miedo cuando pones tu cara en su cara así. 
- Vale, ahora lo pillo.
- Pero la buena noticia es que tengo una forma especial para que beses a tu perro.
- ¿Aha?
- Uno, es segura, y dos, a los perros les gusta.
- ¡Esto es tan emocionante!
- Tienes que besar tu mano y acariciar con ella al perro.
- Voy a probar.
- ¡¡En la cara no!!
- ¿Qué pasa con la cara?
- A los perros no les gusta en la cara, les gusta en el cuerpo.
- Vale, voy a probar otra vez.
- Guay...
Creo que mi trabajo aquí ha terminado, pero recuerda, tienes que besar a tu perro de forma que le guste. Nos vemos.

Si buscamos en Internet fotos de niños y perros veremos como la mayoría de imágenes muestra a los niños abrazando a los perros, tocándoles la cara, besándoles, etc. No es nada aconsejable y ya hemos dicho por qué. La mayoría de mordiscos de perros a niños tienen que ver con que se acercan mal a los perros y éstos se sienten intimidados e incluso atacados. Se puede evitar enseñándoles a hacerlo bien y recordándoles lo que nunca deben hacer. No importa lo bueno que sea vuestro perro y lo mucho que confiéis en él, porque si bien es cierto que puede que nunca vaya a tener problemas con niños o con personas adultas, no podemos hablar de todos los perros por igual. Así que lo mejor es enseñar a los niños a estar cerca de cualquier perro, el vuestro y el ajeno, de forma correcta, por el bienestar de todos.